ACONTECIMIENTO HISTÓRICO EN CARTAGENERA
El lunes 26 de septiembre de 2016 en le patio de banderas del centro de Convenciones Julio César Turbay Ayala de Cartagena se realizó la firma protocolaria del Acuerdo Final para la Paz entre el Gobierno Colombiano y las FARC.
El país y el mundo , con los ojos puestos en Cartagena.. El Presidente Santos y Timochenko, sellaron el acuerdo, que en ese momento se acababa oficialmente la guerra con las FARC y comienza una nueva época para Colombia.
Los dos, colocaron sus firmas con un bolígrafo, una bala convertida en lapicero que se volvió símbolo de la paz.. La banda musical del municipio de Baranoa, Atlántico, toco el himno Nacional con el que a las 5 de la tarde arranco ese histórico acontecimiento.
Enterrar el conflicto de medio siglo con la principal guerrilla del país significo despejar el camino para que el Estado llegue sin los tropiezos de la violencia a las zonas atrapadas en la marginalidad y las haga parte del desarrollo que se requiere para que Colombia sea aún mas competitiva.
A menudo, la guerra ha servido de pretexto para no hacer nada en la Colombia profunda donde ha actuado la FARC -en mas de la tercera parte de los municipios y la mitad departamentos- y donde justamente esta el potencial para convertir al país en una de las siete principales despensas agrícolas de un mundo que cada día demanda mas alimentos.
La inversión en infraestructura, servicios y desarrollo agrícola para sacar el campo colombiano de su rezago es precisamente la esencia del acuerdo sobre desarrollo rural que hicieron el Gobierno y las FARC. Este fue el primero de los seis puntos de la agenda que negociaron.
Si bien subsisten el ELN y bandas criminales, las FARC llegaron a ser la guerrilla militarmente mas poderosa del país y, como ningún otro grupo armado en Colombia, en la mitad de los 90 llegaron a poner en jaque a las Fuerzas Armadas con feroces tomas a bases militares que dejaron decenas de militares y policías muertos y al menos otros 500 secuestrados durante varios años.
Está claro que son la violencia de esta guerrilla, el estado podrá volver sus esfuerzos de seguridad en el combate al ELN y a las organizaciones de narcotráfico, que ya intentan rodear los espacios que dejaron las FARC.
La paz con esta guerrilla, es cierto, implica desafíos para el Estado, y uno de ellos es contenerla violencia que se puede desatar por la disputa de las rentas ilegales que manejaba la FARC. Pero es indiscutible que el cierre del conflicto con este grupo armado es el comienzo hacia un país más seguro. Aunque esto no va a ocurrir de la noche a la mañana.Los beneficios del acuerdo en seguridad no se limitan a que las acciones armadas cesan, también serán claves los aportes que harán las mismas FARC para evitar que más colombianos se conviertan en víctimas de las minas anti personas.
También, en muchos sentidos, el acto en la explanada de Banderas del centro de Convenciones de esta ciudad del Caribe Colombiano fue una celebración latinoamericana. El conflicto de Colombia ha sido visto como un factor de perturbación también para los países vecinos, y por eso acabar el enfrentamiento con la guerrilla más poderosa ha producido un genuino entusiasmo regional.
En estos tiempos, recordemos las palabras de Gabriel García Marqués: " En medio de la confusión y el desencanto no faltan, no faltamos, quienes seguimos creyendo, de un modo empecinado y tal vez ilusorio, que la PAZ es posible".
Referencia:
www.eltiempo.com › politica › proceso de paz